jueves, 29 de septiembre de 2011

Tú y yo.

Tú y yo tenemos una cosa en común y una que nos diferencia.
 Lo que nos une es que ninguno concede deseos.
 La que nos separa es sencillamente  que yo si cumplo lo prometido.

Ya no es cierto, pero tenía que ponerlo.

Y sigo siendo esa niña que te conoció hace tiempo y que se fijo en ti. Sigo siendo la primera vez que hablamos, sigo siendo nuestras primeras peleas sigo siendo los amigos que competíamos. Sigo siendo nuestras primeras risas juntos, nuestras tardes de aburrimiento, sigo siendo esa que se reía por tus tonterías, sigo siendo la que competía tus canciones, la que te vio crecer, sigo siendo esa que sabia tus amoríos y la jodían. Sigo siendo esa que te ayudaba, sigo siendo esos días, la primera vez. Sigo siendo borracheras, esa noche en vela , sigo siendo esas ganas de verte, de echarte de menos, sigo siendo la loca que muere por ti pero sobre todo, sigo siendo esa chica que se enamoró de ti hace mucho tiempo y lo peor de todo... que aún sigue enamorada.

 

Esto es un texto que me pasó una amiga hace un par de semanas. Necesitaba ponerlo aunque ya no sea del todo cierto.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Reflexión de un sábado cualquiera.

Ya no siento lo mismo por él, para mi es únicamente muy buen amigo y si, le sigo queriendo, pero ahora sé que no volvería con el. Tantas cosas han cambiado entre nosotros, la confianza que casi no hay, al menos no tanta como antes, pero la recuperaremos y volveré a ser su mejor amiga, la persona en la que más confíe. Que tengamos miles de momentos de risas y felicidad. Que consiga hacerme sonreír mientras lloro o me agobio, que esté cuando le necesito. Tendremos esas conversaciones de horas y horas por la noche en las que mi madre me regañaba por reírme tan alto.

Con todo esto, quiero decir que no le echo de menos como novio pero si como mi mejor amigo, no sé si él sentirá lo mismo pero sé que de aquí a un tiempo volverá a ser lo mismo de siempre, volveremos a ser los mismos de siempre. Y espero que quede poco para conseguirlo y me da igual lo que haga con otras porque yo también lo he hecho y no pasa nada.

Dejamos muchas cosas sin hacer, muchas promesas sin cumplir, pero al fin y al cabo el pasado es el pasado y no se puede cambiar y hay que vivir con ello, para bien o para mal.

Él hizo cosas mal pero yo también. Me quiso, yo también. Me hizo daño.... yo creo que ni la mitad.

Pasará el tiempo y tendremos una conversación en la que cuente todo esto, en la que le explique todo esto... mientras tanto, todo seguirá patas arriba.